Fsioterapeuta pediátrica en desde el año 2000 trabaja en Palma de Mallorca tratando a bebés y niños que necesitan fisioterapia y osteopatía infantil. Además es un referente en la divulgación de la fisioterapia y osteopatía pediátrica online fuera de la isla.
Podéis seguir su trabajo en web raquelbermejo.com
Fisioterapia respiratoria que sí funciona cuando el bebé tiene mocos
Hoy os voy a hablar de técnicas de fisioterapia respiratoria pediátrica que sí funcionan con bebés con mocos .
Estamos en época intensa de cambios de temperatura. Frío en la calle, las casas calientes , muchos virus en el ambiente… Las consultas de pediatría y de fisioterapia respiratoria están llenas estas semanas con bebés con mocos.
Algunos acuden con mocos, otros además le suman fiebre y otros, además, tendrán fatiga al respirar… Vamos a ver qué cosas pueden ayudar y qué cosas tenéis que considerar desde ya como cosas desaconsejables totalmente.
Vayamos primero por lo que no se debe hacer.
• Clapping (o lo que muchos conocéis como golpecitos en la espalda cuando el bebé tiene mocos). En nuestro país ha habido durante muchos años una tendencia a utilizar este tipo de técnicas, especialmente cuando el bebé tiene bronquiolitis. La teoría era que esos golpecitos ayudaban a “despegar” las secreciones de los pulmones y así ayudaban luego a expulsarlos. En la práctica, y con la evidencia científica como demostración, el resultado es bastante diferente.
Cuando un bebé tiene bronquiolitis el paso y llegada de aire a los pulmones es más dificultoso. Para que lo entendáis sería algo así como un estrechamiento de los tubos (bronquios y bronquiolos) por donde pasa el aire. Lo que nos interesa en estos casos es que estos “tubos” tengan un calibre adecuado para que el bebé pueda respirar bien. Pues bien, se ha demostrado que tras realizar el clapping no sólo no ayuda a abrir estas vías de paso de aire sino que, además, se cierran más, pudiendo llegar incluso en ciertos bebés y niños a ocasionar broncoespasmo.
Por culpa de esta técnica, la fisioterapia respiratoria en bebés con bronquiolitis tiene mala prensa, pero en realidad es sólo una técnica, existen otras que aplican los profesiones y sí son efectivas y muy beneficiosas.
• Aspirador nasal. Os voy a poner un ejemplo claro. Seguro que alguna vez os habéis sonado y os habéis quedado con la sensación de quedaros sordos, verdad? Al haber hecho una gran espiración habéis colapsado la trompa de Eustaquio (que une nariz y oído). En ese momento abrís y cerráis la boca como locos y conseguís “destaponar” esa sensación. La trompa de Eustaquio tiene forma de tobogán a partir de los 6-8 años y esa apertura y cierrre de la boca consigue desbloquearla. Ahora bien, en un bebé la trompa es más horizontal (se irá volviendo como un tobogán a medida que se vaya desarrollando), así que si aspiramos y hay moco podemos colapsar la trompa y crear una otitis con facilidad.
Sí puedes utilizar la típica pera de toda la vida, para “recoger” el moco que haya a la entrada de las fosas nasales tras el lavado nasal que os cuento a continuación, pero no aspirar.
Y que sí podemos hacer.
1. Lavados nasales: los lavados nasales consiste en introducir suero salino para fluidificar los mocos y que el bebé los saque mejor.
Los mocos son el paraíso de las bacterias y los virus, así que si hay mocos hay que sacarlos para evitar problemas. En niños grandes lo suyo es que se suenen ellos tras el lavado, pero en bebés es algo más laborioso al no haber colaboración.Voy a comentaros varias cuestiones tal cual lo explico yo a las familias que vienen a tratamiento con bebés, no obstante, cualquier duda os aconsejo que acudáis a vuestro fisioterapeuta pediátrico de referencia y os pueda empoderar para hacerlo en casa.
• Cómo se hacen: se coge suero fisiológico, puede ser en monodosis, en botella (tipo Rhinomer) o con jeringa. Se coloca al bebé boca arriba. Se ladea la cabeza del bebé hacia el lado derecho cerrando la fosa nasal de ese lado y se introduce el suero. Se repite inmediatamente lo mismo del otro lado. Acto seguido se cierra la boca del bebé y veréis que al coger aire por la nariz desplaza todo el suero y los mocos hacia la garganta, repites este cierre y apertura de la boca hasta que al coger aire el bebé oigas que la nariz no suena con mocos. Lo que nos interesa es que el bebé trague lo que tiene ahora en garganta, puede ser que tosa un poco y se lo trague, ya estaría listo el lavado, sino es así puedes darle el pecho, si toma lactancia materna, o biberón, y conseguirá llevarlo a estómago. De ahí se eliminará en heces sin mayor problema. Como veis es una técnica que parece algo compleja aunque no lo es tanto. Os aconsejo que vuestro fisioterapeuta pediátrico os pueda enseñar para hacerlo bien en casa.
• Cada cuánto se hacen: cada vez que le oigamos mocos al bebé. Si están bien hechos no será muy frecuente. Si no hay mocos, no hace falta hacerlo.
2. Hidratación: al igual que en el adulto la hidratación cuando hay mocos nos va a permitir una mejora de la hidratación en las mucosas.
3. Acudir a un fisioterapeuta pediátrico especializado que nos enseñe la técnica. Sé que esto es de perogrullo, pero no hay mejor manera de poder realizar esto bien si nos enseñan como toca. Os puedo asegurar que con lavados nasales productivos y efectivos podéis evitar en gran medidas infecciones respiratorias más severas. Así que acudid al profesional y prevenid. La prevención es siempre el mejor de los tratamientos
Comment
Muchas gracias, la verdad es q yo le aspiró poco, pero la forma de echarle el suero la hago diferente, no se si sera bueno, a mi me va muy bien, pq los mocos le salen muy bien y aun con los de mocos que tiene aun no le ha ido a mas. Yo tengo una geringa q lleno de suero, pues con ella que le tapo todo el horificio nasal y cuando le echo el suero, el moco le sale por el horificio que tiene libre. Y le sale genial!! No se si sera bueno??? Gracias